Desigualdades

Desigualdades

MIGUEL BARRAGÁN TORROELLA a.m.com.mx 7 Febrero 2010

Durante la Segunda Guerra Mundial los alemanes criticaban a sus aliados italianos, diciendo que nunca retrocedían: daban media vuelta y seguían adelante. Así marcha la conducción de nuestro País, que paso a paso retrocede, pero con bastante firmeza.

La insensibilidad con que se trata al pueblo, desde los poderes Ejecutivo y Legislativo es escandaloso, creando un “orden” que se ensaña con tantos mexicanos carentes de lo indispensable, que concede abundantes privilegios a pocos y no sólo niega lo necesario a la mayoría, sino que además les quita lo poco que tiene.

Las naciones prósperas han formado una clase media predominante, consumidora que estimula la producción y el comercio. Aquí se está haciendo al revés: 6 millones de familias clasificadas como clase media se han sumado a la pobreza a partir del año pasado, según el INEGI. Y en el arrebato por captar más ingresos, Hacienda ha llegado al extremo de aplicar el Impuesto Sobre la Renta a las pensiones del Seguro Social que rebasen los nueve salarios mínimos.

Vayamos por partes, dijo el descuartizador. Al uso acostumbrado, en lo oscurito, la Ley de Ingresos de la Federación para 2010 fue el último dictamen de ocho que integraron el paquete fiscal. Entre los cambios más destacados incluye un aumento al IVA; al ISR y la creación de un impuesto a las telecomunicaciones. Los diputados de la Comisión de Hacienda que preside Luis Videgaray, introdujeron sigilosamente incluir las pensiones en el ISR, violando la Constitución, ya que el impuesto se aplicaría retroactivamente e ignorando que el dinero de dichas pensiones, en su momento, pagaron impuestos.

Y mientras vampirescamente se trata de sacar hasta la última gota de sangre del ciudadano cautivo, la fiesta de la casta dorada política es interminable. ¿Sabía usted que se gastan casi 580 millones de pesos ¡diarios! por concepto de prestaciones y, ya integradas, cerca de 2 mil 100 millones, también cada 24 horas, por servicios personales?

Esas son las increíbles cantidades que en la época del “catarrito” los menesterosos mexicanos se vieron obligados a desembolsar para mantener cómodos a los integrantes del Gobierno federal. A lo largo de 2009, el peor año económico en 80 años, el Gobierno e instituciones afines gastaron la friolera de 211 mil 500 millones de pesos en prestaciones, que incorporadas a sueldos y salarios elevaron la cantidad a 765 mil 500 millones de pesos, de acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda.

Pero hay más: si por una parte se empobrece al pensionado cobrándole impuestos, por la otra se trata con generosidad a los ricos ricos. Vea usted, sólo como unos pocos ejemplos, los adeudos diferidos que algunas empresas tienen con el fisco. (Todas las cifras son millones de pesos): Grupo Carso (4 mil 141.36), América Móvil (20 mil 540.06); Cemex: 38 mil 443.41 millones. Bachoco mil 868.93 millones. Televisa (exentada fiscalmente en la ley de ingresos 1010 para que participe cómodamente en su nuevo negocio de fibra óptica) debe al fisco 2 mil 284. 4 millones de pesos en impuestos diferidos. Kimberly (presidida por Claudio X. González Laporte, el mismo que propuso un impuesto del 3 ó 4% a medicinas y alimentos, y que destacó la urgencia y necesidad de que los mexicanos pagaran más impuestos) adeuda al fisco mil 69.

Grupo Industrial Bimbo (que tiene dinero para pagar campañas electorales, pero no para cumplir sus obligaciones fiscales) debe mil 848.4 millones de pesos. Grupo Alfa de Monterrey no ha pagado 3 mil 809.6 millones….y siguen hasta sumar 46 empresas que gozan de la comprensión de Hacienda.

Pero que no concede al ciudadano común