domingo, 7 de marzo de 2010

El Arte de Amar

El Arte de Amar
Raymundo Guerrero López a.m.com.mx 6 Marzo 2010


Erich Fromm, psicólogo alemán, postula que el amor, como cualquier arte, necesita de una teoría y de una práctica: “Si deseamos aprender a amar, debemos proceder en la misma forma que lo haríamos si quisiéramos aprender cualquier otro arte”. La meta es arribar a un amor maduro para lo cual propone la práctica de cuatro elementos necesarios: el cuidado, la responsabilidad, el respeto y el conocimiento.
El amor inmaduro es un amor simbiótico, una unión donde la persona no puede vivir sin la otra. Una unión donde no hay conciencia de la separatidad, como el bebé en el seno materno.
Pero el amor maduro no es cuestión de edad: hay uniones donde la relación a veces es sádica, o a veces es masoquista; es decir, una persona domina, explota, lastima y humilla a otra. Ambas personas pierden su integridad en esa fusión que nos se puede calificar de amor maduro.
El Arte de Amar, dice Fromm, requiere la práctica en cuatro aspectos:
Cuidado. El amor es la preocupación activa por la vida y el crecimiento de lo que amamos. Si una mujer dice que ama las flores y éstas se secan porque no las riega, uno no le cree. Si en el amor de pareja no hay crecimiento y mejora de la otra parte, algo está fallando en ese amor.
Responsabilidad. Ser responsable significa estar listo y dispuesto a responder. Es un acto enteramente voluntario, constituye mi respuesta a las necesidades, expresadas o no, de otro ser humano.
Respeto. Respeto significa preocuparse porque la otra persona crezca y se desarrolle tal como es. Quiero que la persona amada crezca y se desarrolle por sí misma, en la forma que le es propia y no para servirme. “Si amo a la otra persona me siento uno con ella, pero con ella, tal cual es, no como yo necesito que sea”. El respeto se basa en la libertad, el amor es hijo de la libertad, nunca de la dominación.
Conocimiento. El conocimiento en el amor no se queda en la periferia: va a lo profundo. Está unido a la preocupación por conocer a la otra persona en sus propios términos. Puedo saber que la otra persona está encolerizada, aunque no lo demuestre abiertamente, sé cuando está angustiada e inquieta; cuando se siente sola o culpable. Si aparentemente está encolerizada, y la conozco, sé que su cólera obedece a algo más profundo, y la veo angustiada e inquieta, es decir, como una persona que sufre y no como una persona enojada.
Que seas feliz y que hagas felices a quienes amas.
Erich Fromm. El Arte de Amar. Ed. Paidós Ibérica, S.A. 1959, 2000.
http://es.wikipedia.org/wiki/El_Arte_de_amar_(Fromm)

Comentario
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