sábado, 16 de enero de 2010

CSG, ¿gran elector en 2012?

CSG, ¿gran elector en 2012?
PorEsto 2010-01-16
Estado de los ESTADOS
Lilia Arellano

Acumula poder ex mandatario
En sus manos, los hilos del PRI
Bodas, alianzas y padrinazgos
Amalistas contra monrealistas
PRD podría perder Zacatecas

“Todo poder es una conspiración permanente”.-
Honore de Balzac


El jueves pasado —14 de enero— el riesgo de un nuevo “salinato” se respiró como un aire fétido en el homenaje a David Ibarra Muñoz con motivo de sus 80 años de edad, festejo financiado por el empresario más rico de América Latina, Carlos Slim, y que congregó a la vieja guardia priísta, a los sobrevivientes y representantes del antiguo régimen, a los dinosaurios neoclásicos, a una casta de políticos experimentados y ambiciosos con un hilo unificador en torno a la figura del ex presidente más poderoso de las últimas décadas: Carlos Salinas de Gortari, a quien se sigue señalando como el verdadero poder tras el trono y titiritero principal de los actuales tiempos políticos, a tan sólo dos años del esperado resurgimiento del PRI y la inauguración de una nueva “dictadura perfecta”, que sustituya al fallido experimento de la administración panista, tras el rotundo fracaso del foxismo y el calderonismo.

El Hotel Geneve de la Zona Rosa, donde se realizó el convivió en honor al ex secretario de Hacienda con José López Portillo, y en donde se reunieron, entre muchos otros, Beatriz Paredes, Jesús Silva Herzog, Francisco Labastida, Pedro Joaquín Coldwell, María de los Angeles Moreno, Jaime Serra Puche, Alfredo del Mazo, Humberto Roque Villanueva, Rodolfo Echeverría, Manuel Bartlett, Miguel González Avelar, Pedro Ojeda Paulada, Rodolfo Becerril, David Colmenares, José Andrés de Oteyza, Angel Gurría, Jorge Eduardo Navarrete, Francisco Suárez Dávila, Irma Cué, Agustín Acosta Lagunas, Augusto Gómez Villanueva, Heriberto Galindo y Carlos Tello, cuya intención fue festejar al calificado como “mejor economista de México” junto con universitarios, empresarios y diplomático, dejo también plasmada la impresión de un reagrupamiento de una sólida clase política ligada a Salinas de Gortari, que ejerció en forma absoluta el poder durante ese aciago sexenio.
La presencia, actividad, operatividad e influencia de Carlos Salinas de Gortari es ya innegable y se ha ido fortaleciendo, luego de su exilio político en el gobierno de Ernesto Zedillo Ponce de León, desde la gestión de Vicente Fox, con cuya administración sustentó alianzas políticas que le han fructificado.
Fue precisamente durante el foxismo cuando se oficializó su resurgimiento político, también en un evento social, una boda, en un exclusivo sector de la ciudad de Cuernavaca, Morelos, en abril de 2003, en la que los contrayentes fueron su hija Cecilia Salinas y Alfredo Gatica, hijo del celebre bolerista chileno Lucho Gatica, festejo que también reunió a los más conspicuos miembros del PRI, así como a algunos de los empresarios más importantes del país. Diversos analistas caracterizaron la boda como “la reunión del padrino con los otros miembros de la mafia”.
“Salinas está de regreso” fue la nota preponderante de ese evento, aún cuando permanecía fresca en la memoria que su sexenio estuvo marcado como la peor crisis económica en la historia de México —hasta la experimentada el año pasado con el panista Felipe Calderón— así como por un sinnúmero de escándalos de corrupción —sólo igualados por los de Vicente Fox, Marta Sahagún y sus cachorros, los hermanos Bribiesca— sin olvidar los asesinatos políticos de Luis Donado Colosio, Francisco Ruiz Massieu y el cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, por sólo mencionar a los más destacados.
Reciente seguía el alzamiento zapatista, el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, la corrupta privatización de los bancos, la quema de las reservas que llevaron a la devaluación de 1994, el asalto a la nación que significó el rescate bancario y el Fobaproa, el robo a las arcas nacionales con la privatización de empresas públicas que desmantelaron al Estado y construyeron una estructura de poder empresarial vigente y preponderante.
También se recordaba su exilio en Irlanda y Cuba que llegó a su fin precisamente en la administración de Vicente Fox, en la cual su presencia política se afianzó luego de que el PAN sufriera una dolorosa derrota frente a un resucitado PRI, de la mano de dos prominentes salinistas, Roberto Madrazo Pintado y Elba Esther Gordillo.
A partir de ahí, para nadie fue un secreto que Carlos Salinas se constituyó en el poder tras las sombras.
Otros sobresalientes eventos sociales han dado cuenta del poder Carlos Salinas de Gortari, que se ha ido constituyendo como un factor preponderante de la sucesión presidencial del 2012. Uno de ellos fue la boda del gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, el 22 de diciembre de 2007, con la ex señorita Coahuila, Vanesa Guerrero Martínez, que se convirtió en una concentración política en el que la estrella principal no fue el mandatario coahuilense sino el ex presidente Salinas, ante quien el propio Manlio Fabio Beltrones se comportó como subordinado, como un aspirante en espera de la señal del maestro para participar en la carrera presidencial al lado del gobernador Enrique Peña Nieto y de la propia Beatriz Paredes Rangel.
La fiesta por el casamiento del mandatario coahuilense demostró a los ojos de todos la influencia acumulada y el dominio de los liderazgos actuales en el PRI, que sobrevivieron al zedillato y al foxiato y ahora emergen con toda su fuerza ante el debilitamiento de la gestión de Felipe Calderón.
Seis meses después, en otra boda, ésta de Silvana Beltrones —hija de Manlio Fabio Beltrones, presidente de la Junta de Coordinación del Senado de la República, y quien fue gobernador de Sonora durante el sexenio salinista— y Fernando Torres Kennedy, realizada en junio de 2008, en el Colegio de las Vizcaínas, Carlos Salinas de Gortari fue otra vez el centro de la atención pública.
Estuvo acompañado por el principal aspirante del PRI a la Presidencia de la República, el gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, y hasta por otro de sus aliados, el ex candidato presidencial del PAN, Diego Fernández de Cevallos, quien en esta administración calderonista ha acumulado un inmenso poder.
En ese evento, prácticamente le rindieron honores desde del ex candidato presidencial del PRI, Roberto Madrazo, y el coordinador del tricolor en la Cámara de Diputados, Emilio Gamboa, hasta el gobernador de Nuevo León, Natividad González Parás, y el líder del sindicato de Pemex, Carlos Romero Deschamps, entre muchos otros.
Con envidia manifiesta observaban el desaparecido secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño; el entonces titular de Hacienda y actual gobernador del Banco de México, Agustín Carstens; y hasta el entonces titular de la PGR, Eduardo Medina Mora.
Una muestra más del inmenso poder que ha recuperado Carlos Salinas de Gortari se dio durante las negociaciones de las candidaturas a los cargos de elección popular en disputa en los pasados comicios federales que concluyeron con una aplastante derrota del PAN y un impensable triunfo del PRI, que lo colocó en la antesala de Los Pinos.
A finales de marzo del año pasado, durante la reunión de la Comisión Política Permanente del PRI en Toluca, Estado de México, la disputa por el poder fue dominada por tres grupos encabezados por Beatriz Paredes, dirigente nacional del tricolor; Manlio Fabio Beltrones, líder de los senadores priístas; y el gobernador mexiquense, Enrique Peña Nieto.
Como gran artífice de las alianzas, se constituyó el ex presidente Salinas de Gortari, quien se dio el lujo de colocar a su sobrina Claudia Ruiz Massieu —hija de Adriana Salinas— en una posición privilegiada, el cuarto lugar de la lista de la cuarta circunscripción; a su ex secretario particular, Andrés Massieu Fernández; a varios bebesaurios priístas como Federico Madrazo Rojas, hijo de Roberto Madrazo; al reciclado César Augusto Santiago; y sobre todo a Francisco Rojas Gutiérrez, ex director de Pemex y presidente de la Fundación Luis Donaldo Colosio, quien finalmente se convirtió en líder de la fracción priísta en la Cámara de Diputados.
Tras las elecciones federales del 2009, el Congreso de la Unión quedó bajo la dirección de Carlos Salinas de Gortari, a través del propio Manlio Fabio Beltrones, y de Francisco Rojas Gutiérrez.
A partir de ahí, el ex mandatario ha estado preparando el terreno para manejar la sucesión presidencial y viaja por todo el país para entrevistarse con los operadores priístas. Además, en su residencia de Camino a Santa Teresa, en el Distrito Federal, recibe a políticos y empresarios destacados. Han trascendido las reuniones que ha mantenido con gobernadores como Humberto Moreira de Coahuila, Ulises Ruiz de Oaxaca y Fidel Herrera de Veracruz, los cuales no tienen compromisos abiertos con el candidato de Televisa, Enrique Peña Nieto, y están fuera del área de influencia de la tlaxcalteca Beatriz Paredes.
Destacó la reunión con Moreira porque está fuertemente vinculado con la poderosa dirigente magisterial, Elba Esther Gordillo, de quien Salinas se piensa está distanciado, por lo que se trató de un acercamiento con la lideresa que tiene en su bolsillo el dos por ciento de la votación, que puede modificar fácilmente una elección presidencial.
A pesar de todo lo que digan los medios de comunicación, la elección del candidato del PRI a la Presidencia de la República aún no está decidida: Peña Nieto lleva la delantera, pero no se puede descartar de ninguna manera a Manlio Fabio Beltrones, Beatriz Paredes o al propio Fidel Herrera, y tampoco se puede desechar a gobernadores como Rodrigo Medina, de Nuevo León.
El contar con caballos ganadores en la cuadra del PRI puede derivar en una confrontación como las ocurridas en las pasadas elecciones presidenciales del 2000 y 2006, cuando las pugnas internas impidieron que ganaran los comicios, por lo que Carlos Salinas de Gortari trabaja para manejar el proceso, para imponer las reglas del juego político, para determinar la conducción del país y alcanzar nuevamente la Presidencia de la República en el 2012.
El poder acumulado por Salinas es de tal magnitud que ya nadie lo pone en duda y si no baste recordar lo sucedido al ex presidente Miguel de la Madrid Hurtado, quien después de haber manifestado su decepción y arrepentimiento por haber designado a Salinas de Gortari como su sucesor en la Presidencia de la República debido a la “inmoralidad” y los actos de corrupción de su familia, luego reculó, fue obligado a declarar que los juicios sobre su sucesor no podrían tomarse en cuenta dado que su precario estado de salud no le permitían hacerlo de manera coherente y llegó al grado de elogiar la administración de su sucesor.
Actualmente Carlos Salinas de Gortari se siente totalmente seguro de su poder e influencia. Desde hace mucho abandonó su bajo perfil y se deja ver en bodas, cumpleaños, brindis y vacaciones familiares, como bien lo reportó la Revista Quien en el mes de septiembre del año pasado.
Esta y otras demostraciones de poder han llevado al ex candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador, a declarar que “Carlos Salinas ya gobierna de facto la Presidencia de la República”, afirmación que podría estar a discusión. Sin embargo, es un hecho que es un trascendental factor de decisión dentro del priísmo nacional y puede que se convierta en el gran elector.
Por eso no extraña nada que en un evento social de gran envergadura, como lo fue el cumpleaños del destacado economista, David Ibarra Muñoz, y donde se reunieron tantos políticos subordinados a Carlos Salinas de Gortari, el tema principal haya sido la censura a la política económica de Felipe Calderón, que, dijeron, “difícilmente podría estar peor”, y la urgente necesidad de establecer un cambio de rumbo para el país. Lo grave es que este golpe de timón lo encabece un personaje como el nefasto ex mandatario mexicano.

La marcha de Zacatecas
La pugna que han mantenido durante todo el actual sexenio la gobernadora perredista Amalia García, contra el clan de los Monreal, encabezados por el ex gobernador y ahora senador petista, Ricardo Monreal Avila, abre la posibilidad real, peligrosa, de que el debilitado Partido de la Revolución Democrática (PRD) pierda la gubernatura de Zacatecas en la próxima elección local del 4 de julio de 2010, la cual podría quedar en manos del PRI, del PT y hasta del PAN.
Dentro del PRD hay una fuerte pugna por la gubernatura, por lo que para evitar una fatal división del partido, el Consejo Político Estatal del sol azteca en la entidad determinó esta semana que será el próximo 23 de enero cuando se determinará si se tiene un “candidato de unidad” o precandidatos a la gubernatura de Zacatecas.
Por el contrario, para definir a los candidatos a las diputaciones, alcaldías y regidurías se determinó ya que será a través de la elección universal, directa y secreta.
Los aspirantes más fuertes del PRD son José Narro Céspedes, Raymundo Cárdenas, José Calzada Vázquez, los senadores Antonio Mejía Haro y Tomás Torres Mercado y Gerardo Romo Fonseca.
Según una encuesta interna del PRD, Mejía Haro es el aspirante mejor posicionado con un respaldo de 39.7 por ciento, seguido de Raymundo Cárdenas con 25.5 por ciento. Sin embargo, ninguno de los aspirantes perredistas piensa renunciar a sus aspiraciones por lo que se prevé que la elección interna, abierta, causará más división en ese instituto político que disminuirán aún más sus posibilidades de triunfo, a las que tampoco ayuda en nada la administración de Amalia García, que se ha distinguido sobre todo por su permanente confrontación con el clan de los Monreal Avila, cuyo pleito ya suma más de 7 años, aunque se recrudeció en el 2005, cuando la gobernadora zacatecana destituyó de sus cargo a los funcionarios monrealistas e inició una persecución en contra de personajes como Julia Olguín, Jesús de Alba y Apolunio Castillo, a quienes acusó de desviar recursos.
Para la elección del 2007, Amalia y Ricardo Monreal volvieron a confrontarse. El grupo amalista impuso a Sara Buerba, sobre David Monreal en la candidatura para la alcaldía de Fresnillo. Ricardo se rebeló contra esa decisión y logró que su hermano David fuera candidato del PT a ese municipio, que finalmente ganó, al igual que otros monrealistas que compitieron bajo las siglas del PT, PAN y PRI. De este choque resultó que de gobernar 31 municipios, el PRD se quedó sólo con 17.
Amalia acusó a Ricardo de la derrota perredista y éste fue suspendido de sus derechos partidistas por ocho meses. También inició una feroz campaña contra los monrealistas a los que acusó en octubre de 2007 de irregularidades administrativas y desvíos de recursos públicos.
Además, la administración amalista también incriminó a la familia Monreal de tener vínculos con el narcotráfico. Incluso diarios de circulación nacional publicaron que en una propiedad de los Monreal se habían hallado varias toneladas de mariguana.
Para hacer frente a las acusaciones Ricardo se separó de su curul en el Senado para ser investigado por la PGR y posteriormente se apartó de la fracción parlamentaria del PRD y se sumó a la del PT.
El hecho es que la intensa lucha entre amalistas y monrealistas le ha abierto la posibilidad de ganar la gubernatura a los otros partidos.
Por el lado del Partido Acción Nacional, dada la debilidad que ha demostrado en los últimos comicios, busca sumar votos a través de una coalición con el Partido Nueva Alianza o el Partido Verde Ecologista. En este establo, los aspirantes más fuertes son el senador José Isabel Trejo, el diputado federal Luis Enrique Mercado, el alcalde panista Cuauhtémoc Calderón y hasta Felipe Borrego Estrada, aunque muchos analistas ya lo han descartado.
La poca fuerza del PRD y del PAN hace que los priístas ya hagan cuentas alegres y se froten las manos por la posibilidad de regresar al poder en la entidad.
Entre los aspirantes del tricolor se mencionan a Esaú Hernández Herrera, Gustavo Salinas Iñiguez, Silverio López Magallanes, Juan Diego Chávez Raigosa, y el diputado Miguel Alonso Reyes, quien podría convertirse en el caballo negro.
La fuerza del PRI radica en que gobierna 26 de los 58 ayuntamientos, aunque con poco peso político, y tiene a 12 diputados locales.
Los priístas también analizan la posibilidad de hacer alianza con el PVEM, Nueva Alianza y hasta con el PT, que se empecina en competir con uno de los Monreal, aunque sus posibilidades de triunfo son muy pocas.
Es un hecho irrefutable que ante las condiciones político-electorales que predominan en la entidad ningún partido puede ganar por sí solo las elecciones por la gubernatura, de ahí la urgencia de amarrar alianzas.

De los pasillos
Durante su comparencia en la Tercera Comisión de la Comisión Permanente del Congreso, el secretario de Economía, Gerardo Ruiz Mateos, fue acusado por diputados y senadores de engañar a la ciudadanía al asegurar que no hay alza de precios importantes y que habrá crecimiento económico en el 2010… Los legisladores culparon al funcionario de ocultar el agravamiento de la crisis económica, de falta de sensibilidad social frente al alza de precios y de incompetente.
En los últimos dos años, el Ejército ha incrementado los abusos contra los derechos humanos, denunció el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Raúl Plascencia Villanueva… Las quejas contra los militares han crecido en un 500 por ciento ¿y?

lilia_arellano@yahool.com; www.fuego-cruzado.tv; www.estadodelosestados.com.mx

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