Con el SME, con los mineros

Alberto Híjar PorEsto 19 Marzo 2010

En cumplimiento de su actividad de traidor, Alejandro Muñoz, extesorero del SME, acusa al combativo secretario general Martín Esparza de falsificar actas para poder cobrar los 210 millones de pesos de cuotas sindicales secuestradas por el Estado. Otras actividades semejantes como su llamado a los electricistas a liquidarse y renunciar a toda otra reclamación, a sumarse a las empresitas de servicios apoyadas por la Secretaría del Trabajo, han tenido poco éxito ante el clamoroso apoyo de las asambleas ejemplares del SME. Pero la acusación imposible de probar es grave porque el mismo día de la colocación de las banderas rojinegras en las instalaciones saqueadas de la extinta Comisión de Luz y Fuerza del Centro, materia de trabajo y patrón del SME obligado a la revisión del contrato colectivo de trabajo bianual, hubo ya bombardeo de gases lacrimógenos deliberadamente disparados por la policía en las cercanías de unas escuelas para alentar la desaprobación social de la huelga política nacional en apoyo al SME y a los mineros de Cananea y Pasta de Conchos. Ningún reportero se atrevería a entrevistar a Germán Larrea, multimillonario enlistado por la revista Forbes, por su negativa a hacer justicia a los 60 mineros muertos en Pasta de Conchos por las condiciones de trabajo propiciadas por Minera México.

Javier Lozano, el bravucón Secretario del Trabajo en la víspera de la huelga legal del SME ante la evidencia del patrón sustituto, la Comisión Federal de Electricidad, ha vuelto a embestir con la amenaza de la Reforma Laboral. Esta escalada contra los derechos históricos de los trabajadores puede ser definitiva sobre todo frente a la corrupción de diputados y senadores empantanados en las evidencias de sus perversos acuerdos electoreros y a la discusión de problemas tan trascendentales como el horario de cierre de cantinas y antros. Desde fuera, les llegará la propuesta de acabar de una vez por todas con el derecho a la contratación colectiva y a su revisión periódica, a la huelga legal, a la afiliación sindical voluntaria y al registro, a la toma de nota fundada en asambleas democráticas, al recuento de afiliados cuando un conflicto laboral sufra injerencias patronales y estatales, a la comparecencia combativa frente a las instituciones tripartitas donde las cámaras empresariales y el Estado subyugan a los trabajadores. A cambio, contratación personal y con firma de renuncia anticipada, jubilación y prestaciones como la de riesgos de trabajo, flexibilidad laboral en lugar de horario y lugar fijo de trabajo. (Sanborn´s, de Carlos Slim, paga 2 mil pesos de sueldo mensual a las meseras disfrazadas de inditas obligadas a cumplir turnos sin más conveniencia que la de los gerentes, a cambio del derecho a la repartición de propinas).

Son ellos o somos nosotros, proclama el Frente Sindical Mexicano conciente de que está en juego la existencia histórica y social de los derechos de los trabajadores que somos todos los que no somos gerentes, empresarios o burócratas al servicio de los consorcios trasnacionales ni tenemos acciones en la Bolsa de Valores. Ellos atacan y provocan: un juez ha girado orden de presentación contra el dirigente sindical de Cananea, el criminal Wilfrido Robledo famoso como represor de Atenco y ahora jefe policiaco atacó con gases lacrimógenos a la guardia de electricistas en una de sus centrales, pese a la cercanía de una guardería y una escuela, para afectar a los niños y niñas y en otros puntos semejantes ha habido ataques de los granaderos y hasta invasiones de domicilios y hostigamiento y persecución a los dirigentes y sus familiares como el hermano presidente municipal de Martín Esparza, secretario general del SME.

De aquí la declaración del 11 de marzo de la Conferencia Internacional con el SME suscrita por la Federación Sindical Mundial y los representantes solidarios de la India, Francia, Brasil con cinco centrales representadas, Puerto Rico, Galicia, Uruguay, Guatemala y Colombia, ambos con dos centrales firmantes al igual que Venezuela y la Confederación de las Américas. La amenaza de Estado para resolver por la vía represiva violenta el problema del SME nos afecta a todos.