Información = $, ¿cómo?

Información = $, ¿cómo?

por Juan Ciudadano 1 de Marzo de 2010

La información gubernamental es una forma de infraestructura, no menos importante en nuestra vida moderna que nuestras carreteras, la red de energía eléctrica o los sistemas de abastecimiento de agua, dice Carl Malamud, líder de un movimiento ciudadano, Public.Resource.Org, dedicado a poner información gubernamental en línea.

El comentario introduce un reporte sobre aprovechamiento de la información pública en el número más reciente de The Economist. Bajo el título The open society, Governments are letting in the light, el semanario resalta diferentes maneras en que la información gubernamental se aprovecha cuando ésta pasa de estar en su estado crudo a ser organizada, desde la sociedad, en función de usos específicos.

El tema de fondo es pasar de la disponibilidad de la información a la accesibilidad de ésta.

Viéndonos en el espejo de lo que han logrado otros países, habría que reconocer que parte de nuestro atraso es la falta de iniciativas ciudadanas en la laboriosa -y poco sexy comparado con exigir más transparencia- tarea de confeccionar la información pública para convertirla en herramienta directa para la gestión de bienes públicos.

El trabajo que nos falta tendría que estar orientado por preguntas como: ¿Qué información (y presentada de qué manera) es la que necesita el vecino que busca presionar a la autoridad municipal para que termine la introducción de drenaje pluvial o la pavimentación de la calle que está frente a la casa?

Algunos ejemplos -tomados del artículo de The Economist y de otros portales en la red- nos ilustran sobre formas de volver más valiosa la información disponible. Por ejemplo, cómo incidir en rescatar el gasto público más relevante para el ciudadano, frente a gobiernos locales que, en todo el mundo, están viviendo recortes de hasta el 50 por ciento en sus presupuestos.

Iniciativas como changemakers.com son una forma eficiente de dar elementos al ciudadano para presionar a favor de aquel uso de los recursos que les parece más racional en términos de los beneficios directos que reportan.

En México las iniciativas desde la sociedad a favor de la transparencia están orientadas a medir y comparar municipios y gobiernos estatales en disponibilidad de información. Tarea necesaria, pero insuficiente. Lo que urge son esfuerzos organizados para procesar esa información para producir herramienta de gestión de recursos.

FixMyStreet.com en Gran Bretaña busca dar la oportunidad de prender focos rojos en aquellos asuntos locales más preocupantes desde la perspectiva de la gente. La misión de este esfuerzo es, por una parte, poner frente a la autoridad las necesidades de intervención gubernamental en lo que preocupa de manera más inmediata a la población, pero también hacerlo de forma tal que una vez prendido el foco rojo éste no se apague hasta resolverse el problema por la autoridad.

Moviéndonos de lo local a lo nacional tenemos la misma necesidad de transformar aquella información que normalmente no vemos como utilitaria en algo que, bien organizado, se convierta en valor económico concreto para el ciudadano.

La información sobre nuestros procesos judiciales que hoy cuestan miles de pesos (en vueltas y en copias) a todo aquel que tiene que litigar en los tribunales mexicanos, podría estar disponible a un precio infinitamente menor en la red. Sólo para estimar el valor de la información judicial, en Estados Unidos WestLaw y LexisNexis son empresas que juntas ganan cerca de 2 mil millones de dólares al año, a cambio de cobrarle al ciudadano por el acceso a información judicial bien organizada de fácil acceso.

El mercado es tan atractivo que Google está por entrar a este negocio para ofrecer el servicio seguramente a un precio más accesible.

En tiempos de crisis económica como el que vivimos no es fácil mantener en alto la causa por la transparencia. Hacerlo exige traducir la infraestructura informativa en ventajas concretas con valor cuantificable en pesos y centavos.

juanciudadano@juanciudadano.com

Fuente http://www.derechoasaber.org.mx/editorial_completa.php?id=555